Cuando era pequeña y veía
y cuando era joven también veía
y qué demonios,
ahora que soy vieja también veo
los reality chou
las mujeres lloraban porque echaban
de menos a sus madres
Mi mamá querida, la mejor del mundo
moqueando
La madre orgullosa embutida
en un vestido de tul
en un plató de plexiglás
decía
Mi hija siempre fue la más bonita
bailaba para morirse
sobre el tablao
hacía palmas batía la falda
los volantes el dobladillo
remendaba sus rosas plastificadas
pendiente grande
oreja diminuta
Y el presentador
¿Te gustaría hablar
medio minuto con tu madre
la que te dio la vida
la que te dio el ser?
Y la concursante
con cara de grito de Munch
Ay, jorgejavier,
no digas eso
si no es verdad
que no me lo creo
Acto seguido
Mamáaaaaaaaaa
Así los treinta segundos
No se decían nada más
que
¿Todosbien? Todosbientequeremosestamosorgullososdeti
Québienbailabaseneltablaodechicayahoraquébiensalesenlatele
Y sabes qué
Era suficiente
Era suficiente con esa nada
Esa incapacidad ese moqueo ese llanto
Ese patetismo que emociona y asquea
a un tiempo
Porque,
entre todas,
la mamitis es la infección
más entrañable
[Y yo por mi mami mato
y ella por su Andreíta mata
y yo me como el pollo y espero
que me abrace pronto en la cama
Te quiero, mami.