Al regresar de Valentino’s
en Ronda Sant Pere
subiendo por Sanllehy
o quizá en Marina
dos actores secundarios Bob
devuelven
el calorcito al día
Él la agarra y la agarra
mientras ella se despide
besa sus labios sonriendo
y ella, por fin rendida,
también ríe
Yo: cual imbécil,
boca abierta y casco rojo,
tragando humo de escape
de tubo de coche
de culo metálico
En plena Ciudad Condal
me transporto
Parajes inhóspitos
Desiertos culturales
Reggaeton duro
Garrafón afable
Mansiones de cuento
pagadas en B
-(B)ajo mano-
Eran enclave y contexto
de aquellos polvos sado
Zampando feminismos
Cenando odas a la autonomía
Al preguntar,
en la fina línea del clímax
y la muerte,
si puede quebrarse una columna
partirse en dos,
cual palillo,
con los empellones
de delicia
que hacen
a un tiempo
babear
y temer por la vida
Y de rumiar estas cosas
los de alrededor pitan
Espabila, mindundi,
que se te escapan los escargots
que vas pisando huevos
y algunos tenemos prisa
Luz verde y acelero
No hay tiempo para besos
Esta no es la Ciudad del Amor