Yo soy
la que dice no
La que dice no,
gracias
y no,
por favor
Y la que,
si el viento arrecia,
dice que no,
hostias.
Yo soy
la que dice sí,
y gracias,
muchas gracias,
de corazón,
de cola.
De adiós
y de hola.
Yo soy la que abandona
en ciclos
vidas posibles
porque hay una que late
fuerte en otro lugar.
Y cuando ese lugar
asoma la patita
por debajo de la puerta,
la abro de par en par.
—¿Entras?
¿Sí
o
no?