Soñé que alguien me besaba
en una ciudad
tan bonita
en serio
tan
bonita
que pensaba
en el sueño
qué fácil enamorarse
en este beso.
Solo con entreabrir los ojos
se cuela la belleza circundante
ya hay ventanas simétricas
en edificios irregulares
colores pastel erguidos
encendido follaje
adoquines con brincos
césped fresco
infantes.
Un buen beso, un buen sueño,
es jugo
donde dos algo son uno.
Siempre aguardan las lenguas,
como los pájaros
a que vuelvan.
Y por qué no enamorarse
así,
en el sueño
ahora mismo
por un minuto
eterno.